Roland F-120R

Roland pretende romper con la idea del piano digital doméstico de estética y prestaciones más clásicas con su nuevo F-120R, un instrumento pensado para toda la familia con una imagen muy llamativa.

El F-120R sorprende por su mueble, de diseño realmente compacto, pero sobre todo por sus llamativos acabados, siendo la estrella de la gama el rojo pulido, un color inusual en este tipo de instrumentos. También está disponible en blanco y negro pulidos. Son terminaciones delicadas, que suelen marcarse con mucha facilidad, pero estéticamente son mucho más bonitos que los tonos mate. La tapa del piano, que hace la función de atril cuando está abierta, le otorga un aspecto de moderna consola muy alejado de la imagen que tenemos de un piano digital doméstico.

Sus prestaciones tampoco son habituales. Lo normal en un piano digital de esta gama es que ofrezca unos 10 ó 20 sonidos distintos, algunos ajustes de sonido, y poco más. El F-120R se atreve a incluir funciones más propias de otras categorías, con 40 sonidos distintos, más de 180 canciones y 60 ritmos de acompañamiento, con tres modos distintos de uso: Split Chord, Split Tone y el interesante Split Off, también llamado "Pianist", que reconoce cualquier acorde que toquemos. Los ritmos son ampliables a través de su puerto USB, multiplicando hasta el infinito sus posibilidades. Todo esto se completa con un impresionante teclado en acabado Ivory Feel-G, que simula el tacto tipo marfil de los pianos de cola, y el sistema de contrapeso de tecla PHA Alpha II, que aunque no esté tan conseguido como el GH-3 de Yamaha, tiene el añadido del motor de sonidos Super NATURAL, que permite un abanico de sonidos y matices imposible de encontrar en otros pianos de su categoría.

Después de ver su rompedora estética y sus posibilidades, lo normal es que pensemos que el F-120R será caro, y es que hasta ahora no existía ningún piano digital "de diseño" por debajo de los 3.000 euros. Pero su precio también es sorprendente, ya que se puede encontrar por algo más de 1.500 euros, una cifra nada descabellada teniendo en cuenta todo lo que ofrece.