El primer anuncio de Omega para este 2.013 es un revolucionario calibre antimagnético capaz de soportar hasta 15.000 gauss. El primer reloj que estrene el llamado calibre 8508 será un Seamaster Aquaterra.
La idea del calibre 8508 es simplemente genial. Lejos de recurrir a las típicas cajas antimagnéticas que protegen el mecanismo del reloj, Omega ha desarrollado un movimiento en el que todos sus componentes son resistentes al magnetismo, permitiéndose el lujo de poder hacer un modelo que resiste hasta 15.000 gauss al mismo tiempo que podemos contemplar la maquinaria a través de su fondo visto. Supongo que el resto del calibre será bastante similar al conocido 8500, automático de remonte manual y con su famoso escape coaxial.
Para presentar esta maravilla de calibre, Omega ha optado por la vía más sencilla: copiar el diseño del Rolex Milgauss, el reloj antimagnético más conocido del mercado. Sinceramente, creo que llegados a este punto, Omega tiene capacidad de sobra como para desarrollar diseños excepcionales y con personalidad propia, pero la obsesión que tienen por ponerse al nivel de Rolex les lleva a hacer un ridículo como este, en el que al nuevo modelo recién presentado ya se le apoda en foros especializados "el Quincemilgauss". Y lo más triste de todo es que este Aquaterra le da un repaso en todos los aspectos al Milgauss, superándolo en resistencia antimagnética, estanqueidad, reserva de marca y calidad de acabados, pero se ha quedado en una triste copia del carismático modelo de Rolex. Espero que tengan guardado algo más para Basel, porque desde luego, este no es el camino.
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