Tudor Heritage Black Bay

Es el bombazo de Tudor para este año. Aprovechando el tirón que tienen los modelos vintage entre los coleccionistas y fans de Rolex, han decidido relanzar una versión del Submariner con muchos detalles inspirados en el primer reloj de buceo de la manufactura suiza del año 1.954.

El nuevo Heritage Black Bay recuerda mucho al Submariner vintage pero con detalles que hemos visto en otros Tudor de época. La novedad de este diver es el bisel en color rojo, es su principal seña de identidad. Lo hubiera preferido en color negro, pero no le queda mal. La caja es de acero sin protectores de la corona con 41 mm de diámetro cuando el original de Rolex tenía 38 mm (el actual mide 40 mm). El calibre es un ETASA 2824 ajustado y decorado por Tudor, automático de remonte manual que late a 28.800 alternancias por hora y tiene una reserva de marcha de 38 horas. Son muy atractivas las agujas tipo Snowflake, le dan mucha personalidad y nos recuerdan a los antiguos Submariner que vendía la segunda marca de Rolex. Estas agujas y los índices llevan tratamiento de superluminova para ser perfectamente visible en la oscuridad. La estanqueidad del Black Bay es de 200M y mantiene la leyenda clásica de la marca de ROTOR-SELFWINDING que hace referencia al movimiento automático que lleva. La corona, que lleva el grabado de la rosa de Tudor, es sobredimensionada y tiene aspecto de ser muy cómoda de usar. El cristal es de zafiro abombado para asemejarse a los antiguos cristales de plexiglass que llevaban los divers de la época, resaltando ese aire vintage.

El Tudor Heritage Black Bay estará disponible con armis de acero (con correa nato negra incluida en el paquete de venta) o con correa de piel envejecida. Aún no se sabe el precio, pero se especula con que ronde los 3.000 euros, cantidad que muchos fans están dispuestos a pagar por esta maravilla cargada de nostalgia.  Más información y fotos en: http://www.tudorwatch.com/es/heritage-black-bay/